Este
domingo, 2 de febrero, a partir de las 10.00 y hasta las 14.00 horas, todos los
vecinos y visitantes de la villa marinera están invitados al que será el primer
Rastrillo de Playa Lisa. Éste se celebrará todos los primeros domingos de mes y
podrá participar en él cualquier vecino que esté censado en Santa Pola y no sea
profesional de la venta de objetos usados o de segunda mano.
El Rastrillo tendrá lugar en el parque Ricardo Banegas,
junto a la Iglesia
de San Antonio de Padua, en Playa Lisa. Para esta primera edición, son quince
las personas que han confirmado su asistencia y contarán con un puesto, cada
uno, de un máximo de cuatro metros de largo. Todos aquellos que estén interesados
en participar pueden ponerse en contacto con la Asociación de Vecinos
de Playa Lisa-Tamarit en el teléfono 687 70 55 57.
Antonio José Sánchez, presidente de la Asociación , afirmó que “de momento, contamos con quince inscritos, pero
cualquiera que esté interesado puede hacerlo la misma mañana del domingo, pues
estaremos en el parque desde las 08.00 horas. Tenemos calculado un máximo de 35
expositores, que rodearán todo el parque. También se podrán colocar puestos
alrededor de las primeras pérgolas. El precio del stand es de tan solo tres
euros, por lo que animamos a todos aquellos que tengan algo de lo que se
quieran desprender, que acudan”.
Y, ¿qué se puede “vender” en este tipo de rastrillos? Encarnación Mendiola,
concejala de Comercio, aseguraba que“prácticamente de todo, desde
electrodomésticos hasta ropa, pasando por televisores, cuadros, libros… Este tipo de rastrillo, que se organiza en Gran
Alacant todos los terceros domingos de mes, ha demostrado una amplísima
aceptación por parte del público y cada vez son más las personas que acuden,
tanto para comprar como para vender, y más en estos tiempos que corren”.
Tanto desde la Asociación como desde la Concejalía se espera
que esta iniciativa ayude a dinamizar una zona de la villa que, en invierno,
tiene una baja ocupación poblacional. “Estamos seguros”, indicaba Sánchez, “de que la facilidad de aparcamiento y la presencia de establecimientos
hosteleros alrededor del rastrillo animarán a muchos a pasar una mañana de
domingo diferente”. Para esta primera ocasión, no se tiene organizada ninguna
actividad cultural o deportiva de forma paralela, “lo que no quita que, en sucesivas ocasiones, no se
prepare algo para llamar a más público”, apuntaba Mendiola, quien añadía que “entre otras cosas, podemos dedicar algún domingo al
trueque o hablar con asociaciones de tipo cultural o deportivo. Hay un amplio abanico de posibilidades”.