La concejala de Servicios Sociales, Ana Blasco, ha visitado
esta mañana la playa accesible de Gran Playa en la que se unen la zona adaptada
para personas con movilidad reducida y el área especial para discapacitados
psíquicos, que ha sido este verano posible gracias a la subvención otorgada por
la Fundación La
Caixa a ADIPSA.
La edil ha estado acompañada por el director de la oficina
principal de La Caixa
en Santa Pola, Juan Martínez Pons, la presidenta de ADIPSA, Irene Gonzálvez, y
la responsable de la Oficina Municipal
del Voluntariado, Matilde Quislant.
Ana Blasco ha comprobado la satisfacción de los usuarios que
están utilizando este servicio, y ha explicado que “las playas accesibles son
una prioridad para nuestro Ayuntamiento porque damos la posibilidad de
disfrutar de nuestro litoral a todas las personas con cualquier tipo de
discapacidad, y esto permite un merecido respiro a sus familiares”.
Blasco ha recordado que “la carpa de discapacitados
psíquicos ha sido posible este año gracias a la implicación de diversas áreas
municipales como los alumnos del Taller de Empleo, trabajadores en colaboración
social y voluntarios de la oficina municipal, además de la Fundación La Caixa que aporta la
financiación necesaria para contratar a la coordinadora del área”.
Las carpas de Gran Playa estarán abiertas del 1 de julio al
31 de agosto en horario de 11 a
19 horas, y durante el día los usuarios pueden bañarse, participar en talleres,
aquagym, comer y tener su rato de relajación, atendidos por personal
especializado según la dependencia de cada uno.
Asimismo, las dos playas accesibles para discapacitados
físicos de Levante y Gran Playa estarán abiertas hasta el 9 septiembre con una
elevada demanda de los usuarios. Cualquier persona con movilidad reducida puede
utilizar este servicio, si bien es necesario que los grupos que quieran venir avisen
con antelación para organizar el personal y medios necesarios para su perfecta
atención.