El alcalde de Santa Pola, Miguel Zaragoza, ha realizado unas declaraciones acerca de la noticia de la suspensión de pagos de la empresa que está construyendo la ampliación del Centro de Salud:
“El Ayuntamiento de Santa Pola ha tenido conocimiento esta mañana a nivel extraoficial de que presentó suspensión de pagos la empresa que está construyendo la ampliación del Centro de Salud. Inmediatamente me he puesto en contacto con el secretario autonómico de Sanidad, Luis Rosado, para comunicarle el hecho, que él también desconocía. El Ayuntamiento está recabando la información necesaria, al mismo tiempo que la Consellería de Sanidad, que es la que ha adjudicado las obras para su ejecución a esta empresa constructora.
Las obras están en un porcentaje de ejecución de aproximadamente un 85%, a nivel presupuestario está ejecutado en un 70% y quedaría un mes de ejecución material.
La Sra. Lafuente, portavoz del Grupo Municipal Socialista, habrá tenido conocimiento hoy mismo de los hechos, al igual que yo, puesto que su escrito está registrado con fecha de hoy en el Ayuntamiento. Por lo tanto, entiendo que su afirmación de que tenía conocimiento de ello hace tiempo es falsa.
Es lamentable que estos hechos sucedan cada vez con mayor frecuencia derivados, seguramente, de la crisis que las empresas atraviesan a nivel nacional. María Lafuente, siguiendo su línea, se regocija de los males ajenos cuando no debiera hacerlo, puesto que estas cosas suponen un drama para los trabajadores que pierden su empleo, para las pequeñas empresas que corren el riesgo de ir a la quiebra y para las empresas más grandes que tienen que echar el cerrojo.
Si su jefe de filas hubiera antepuesto los intereses de los trabajadores españoles por encima de las siglas socialistas, si no hubiera negado una crisis que todos los países europeos veían venir, negación con intereses partidistas por estar próximas las elecciones generales del 2008, si no hubiera despilfarrado la herencia económica que recibió del Partido Popular, si se hubiera puesto a gobernar en vez de enfrentar y producir un descrédito de los inversores que huyen despavoridos de nuestro país, estas cosas seguramente no sucederían, no tendríamos en la actualidad 4.690.000 parados y un millón de familias sin ningún tipo de ayuda para poder subsistir. Y todo esto se ha propiciado con la ayuda de María Lafuente, riéndole las gracias a su jefe de filas y apoyándolo en todas y cada una de sus desacertadas decisiones, por supuesto con el aplauso de los sindicatos y algunos partidos nacionalistas que también antepusieron sus intereses por encima del de los trabajadores.
Sra. Lafuente, yo seguiré trabajando para que finalicen las obras del centro de salud y de la piscina, y lo haré con seriedad, sin risas como la suya, porque eso es lo que los santapoleros necesitan. Usted negó en su día los bocadillos a los marineros y su jefe, el Sr. Zapatero, el iluminado, está negando los bocadillos a muchas familias santapoleras, y eso, Sra. Lafuente, no se lo voy a tolerar ni a usted ni al Sr. Zapatero, y mucho menos que intente desviar y culpar a los que en todo momento le hemos dicho que ese camino llevaba a un precipicio suicida”.