Felicidad por el verano disfrutado y tristeza por el final de la temporada estival. Esta mezcla de sensaciones se vivió el pasado sábado en las carpas del Área Especial para discapacitados psíquicos de Gran Playa en donde los usuarios y familiares celebraron una fiesta de fin de verano. Gracias a la colaboración de la Fundación Caja Murcia con el Ayuntamiento ha sido posible un año más este espacio de convivencia e integración que permite a un colectivo con tantas necesidades disfrutar de la playa como cualquier otro ciudadano.
La concejal de Servicios Sociales, María Asunción Ruiz, acompañó a los usuarios en esta fiesta de despedida en la que representaron una obra de guiñol. A lo largo del verano las carpas han estado abiertas durante ocho horas en las que se han estado realizando talleres y juegos además de disfrutar del baño en la Gran Playa. Esto ha supuesto un ejercicio de integración y compañerismo para los usuarios, procedentes no solo de Santa Pola, sino también de localidades próximas.
Cabe destacar que la experiencia supone un importante respiro para sus familiares, que agradecieron la iniciativa y pidieron su continuidad en años próximos a pesar de las dificultades económicas. Asimismo valoraron el interés de la concejalía de Servicios Sociales en promover estos proyectos y mostraron su agradecimiento a la Fundación Caja Murcia por asumir los 36.000 euros de presupuesto que ha costado este año mantener esta infraestructura sobre la arena de Gran Playa.