Santa Pola puede afirmar que el absentismo en la
educación obligatoria es bajo y los datos lo avalan. Si a ello se une el
elevado grado de resolución de casos gracias al Programa de Prevención e
Intervención del Absentismo y a la pronta acción interna por parte de la
dirección de los centros educativos. La información la expusieron en rueda de
prensa Ana Blasco, concejal de Servicios Sociales; Tomás Martínez, edil de
Educación, y las educadoras sociales de Primaria y Secundaria, Aurora Amador y
Leticia Serrano respectivamente.
Factores para la resolución de casos
Blasco
reiteró que la clave del éxito de este Programa de Prevención e Intervención
del Absentismo radica en “una forma de trabajo directa y de comunicación fluida
entre inspección educativa, directivas de los centros, Policía Local y
Servicios Sociales”, afirmación en la que Tomás Martínez se mostró totalmente
de acuerdo. Otro aspecto fundamental del alto grado de casos solucionados es la
efectiva primera intervención del centro al evitar que el absentismo se anquilose.
Dado que se trabaja con un concepto abstracto, Leticia
Serrano aclaró la medición del absentismo escolar: “en Primaria se mide por
sesiones y el Secundaria existe absentismo cuando el alumno falta a más del 20
por ciento de las horas lectivas mensuales”. Se trata de un porcentaje bajo, lo
que ayuda en una rápida detección y en evitar que la conducta absentista se
perpetúe.
Además, el contacto es directo
también entre todas las áreas de Servicios Sociales, dado que, “por ejemplo,
los casos en los que se detectan problemas familiares, se derivan directamente
al SEAFI”, según Blasco.
70 por ciento de resolución en
Secundaria
Como
explica el edil de Educación, “el porcentaje de absentismo es mayor en
Secundaria que el Primaria”. En Secundaria se atendieron, durante el curso
escolar 2012-2013 un total de 117 casos sobre alrededor de 1.200 alumnos
mientras que en el mismo periodo, se trataron 30 casos de absentismo entre los
alrededor de 1.400 alumnos de Educación Primaria.
De los 117 casos atendidos en
Secundaria, se han solucionado 82, véase, el 70 por ciento. De estos 82, 42 han
sido resueltos por el centro educativo y continúan en seguimiento durante este
curso escolar. Los 40 restantes han sido solventados gracias a la acción de los
educadores sociales del Ayuntamiento. De los 117 casos atendidos, 23 eran
herencia del curso 2011/2012 y 94 eran casos nuevos.
Este año escolar, además, se está
realizando seguimiento de 13 casos no solucionados para comprobar si los
alumnos continúan sus prácticas absentistas. Según la educadora social
responsable de Educación Secundaria, “la mayor gravedad reviste en los casos no
resueltos y que se pasan de la edad de escolarización obligatoria, los 16 años,
con los que hay que buscar recursos alternativos como que asistan de oyentes a
las clases preparatorias para obtener el Graduado en ESO”.
De estos 117 casos, 78 se concentran
en el IES Santa Pola y los 39 restantes en el Cap de L’Aljub. “Existe mayor
número en el IES Santa Pola porque el número total de alumnos es mucho más
elevado”, aclaraba Tomás Martínez. Además, también se aprecian más casos de
absentistas féminas que varones.
En cuanto a cursos, la falta a las
clases se concentra en los cursos finales de ciclo, como 4º de la ESO. Respecto al horario,
abundan más en la primera y la última hora de clase.
86 por ciento de éxito en Primaria
De
los alrededor de 1.500 alumnos que estudian en los colegios de Santa Pola,
durante el curso 2012/2013 se han atendido a 30 casos de absentismo. De éstos,
la actuación interna del centro ha conseguido resolver once y la actuación del
Programa de Prevención e Intervención, quince. Por tanto, 26 casos
solucionados, que suponen un 86 por ciento del total.
Los cuatro menores absentistas
restantes son “crónicos y se está realizando un seguimiento de su actividad
durante este curso escolar”.
Los cursos en los que se acumula la
falta a las clases en Primaria son 4º y 6º, que coincide con el final de ciclo
y con la mayor concentración de repetidores. En cuanto a género, el 62,2 por
ciento son niñas y el 37,8 son niños.
Aurora Amador coincide con el edil
de Educación, Tomás Martínez, en que es “más fácil erradicar el absentismo en
Primaria que en Secundaria, ya que en la
ESO es cuando el hábito está arraigado” por ello se incide en
trabajar sobre aspecto conductual de los niños.
Causística y actuación
Las
causas de la no asistencia a clase son variadas, aunque se pueden resumir en
dos. Primeramente, las instrínsecas de la adolescencia, como la desmotivación,
el fracaso escolar, repetir curso, etc. En segundo lugar, las que se
circunscriben al ámbito familiar como enfermedad, despreocupación por los
estudios en el núcleo doméstico y casos familiares que requieren una actuación
global de Servicios Sociales.
Ante ello, se trabaja, como se
apuntaba líneas arriba, de manera transversal y conjunta. Algunas de las
actuaciones concretas son: charlas e intervención con familiares, apoyo al
estudio, recuperación del hábito de estudio, derivación en actividades
extraescolares por las que el alumno muestre habilidades y motivación y siempre
un tratamiento individualizado de los casos. De hecho, en Secundaria se
interviene en labores de orientación y asesoramiento familiar en el cien por
cien de los casos.
La transversalidad se muestra
también en la derivación de casos a Fiscalía, que ha decrecido “porque cuando
se percibe el absentismo y las conductas disruptivas, Servicios Sociales actúa
inmediatamente”, según Serrano. Por otro lado, el pasado curso escolar se
derivaron seis casos al Centro de Día y siete al Centro de Animación Felipe II.