viernes, 21 de febrero de 2014

La OMIC ahorra 199.373 euros a los consumidores mediante 841 reclamaciones

La Oficina Municipal de Información al Consumidor, OMIC, realiza balance de actividades durante 2013. Durante el año anterior recibió 841 reclamaciones, de las cuales  se han resuelto por mediación 398, es decir un 47 por ciento, existiendo todavía alrededor de 110 en tramitación, cuyo fallo no se conoce todavía. En términos monetarios, esta oficina ha ahorrado a los ciudadanos casi 200.000 euros gracias a los buenos resultados de eficacia y resolución de reclamaciones.

            La Ley de Bases de Régimen Local aprobada en enero dispone la desaparición de la OMIC en aquellos municipios menores de 50.000 habitantes que no cumplan con el plazo de pago de 60 días a proveedores y que no respeten determinados aspectos de saneamiento económico. Al respecto, Encarnación Mendiola, concejal de Comercio, expresó la realidad de que “la OMIC continuará prestando servicio porque el consistorio santapolero cumple con todos los requisitos que la ley contempla para su mantenimiento”
            La OMIC trabaja en tres frentes. Primeramente consultas, es decir, acciones de mero asesoramiento en las que no se abre expediente. En segundo lugar, se tramitan reclamaciones, en las cuales sí se abre expediente para llevar a cabo una mediación. El último frente es de las denuncias, por las cuales el ciudadano no reclama algo para sí sino para el bien común.

Alto grado de efectividad
A nivel numérico, la OMIC recibió en 2013 un total de 1.532 consultas, 841 reclamaciones y 16 denuncias. Los datos más jugosos nos los proporcionan las reclamaciones, que son, al fin y al cabo, el medio por el que se abre expediente. De las 841 reclamaciones se ha desestimado un 30 por ciento, es decir, 253. Se ha resuelto por mediación el 47 por ciento, que asciende a 398. Se han derivado e inhibido a otros organismos un total de 60, un siete por ciento. En tramitación existen todavía alrededor de cien, es decir, un catorce por ciento, y se ha archivado un uno por ciento, a saber, un total de doce.
            La estimación económica ingresada en las cuentas bancarias de los usuarios asciende a 199.373 euros. Además, otra parte de lo conseguido por los ciudadanos a través de sus reclamaciones no es calculable o mensurable, dado que se trata de soluciones en especie, por ejemplo, cuando un usuario reclama por problemas con el dispositivo móvil y la empresa de telefonía le cambia el móvil.

Telefónicas y bancos, cabeza de reclamaciones
La telefonía es la reina de las reclamaciones, 450, un 54 por ciento del total, y los problemas más frecuentes versan sobre garantías de terminales, permanencias e incumplimiento de contratos. El segundo puesto, con el 13 por ciento del total de reclamaciones, 108, es para bancos y financieras. Se trata del sector que más aumento de reclamaciones ha sufrido en tan sólo un año, principalmente por aspectos como las comisiones y las cláusulas-suelo. De cerca le sigue el sector eléctrico, con el cinco por ciento (45 reclamaciones) y, en cuarto lugar, otro cinco por ciento de las reclamaciones versaba sobre seguros, que supusieron otras 45 reclamaciones.
            Los principales motivos de reclamación en la mayoría de los ámbitos y, en concreto en los arriba citados, son: la mala prestación del servicio (un 32 por ciento de las reclamaciones), el incumplimiento de las condiciones de venta (con un 20 por ciento de las reclamaciones), la negativa a prestar el servicio 8 con un diez por ciento de las reclamaciones) y el precio y cláusulas abusivas y la negativa a prestar un servicio (un nueve por ciento).

Denuncias y quejas
Hostelería recoge un cuarto de las 16 quejas y denuncias que los ciudadanos realizaron en la OMIC durante 2013. Tanto como bancos y financieras como servicios sanitarios obtienen sendos 19 por ciento de quejas y denuncias.
            Los motivos capitales de este área de trabajo de la OMIC fueron la mala prestación del servicio (un 38 por ciento), la negativa a prestar el servicio (trece por ciento), la deficiente calidad del servicio (trece por ciento) y la irregularidad higiénico-sanitaria (trece por ciento).
            En cuanto a la resolución de las denuncias, un 38 por ciento fueron inhibidas a otros organismos, un cuarto fueron desestimadas y otro 25 por ciento se derivaron a los servicios territoriales. Del doce por ciento restante, la mitad está en tramitación y el otro seis por ciento, archivada.

Breves plazos de resolución
En cuanto al plazo de resolución, las reclamaciones sobre telefonía “se suelen resolver en un mes, “porque las telefónicas han puesto, al fin, a disposición de la OMIC un servicio de atención directo. Se trata de una demanda histórica de las Oficinas Municipales de Información al Consumidor que finalmente hemos conseguido”, sostiene Toñi Montiel, técnico de la OMIC de Santa Pola.
            En lo que respecta al ámbito de seguros y sector bancario, las reclamaciones suelen estar resueltas en un plazo de dos meses. Para el resto de áreas, lo normal viene siendo un mes.

Más usuarios concienciados
Toñi Montiel explica que en 2013 aumentó el número de usuarios con respecto a 2012. Este aumento de la concienciación del consumidor se debe, en gran parte “a las charlas y campañas que la OMIC ha llevado a cabo como las charlas sobre preferentes y deshaucios que se celebraron en diciembre o como las charlas temáticas sobre claúsulas-suelo, bancos y telefonía, entre otras, diversificadas en distintas épocas del año”. Otro  factor que explica el incremento de usuarios es el boca a boca de una gestión rápida y eficaz.
            Por tramos de edad, el grupo de la tercera edad es el que más aumento ha sufrido. Los jóvenes también se unen a esta corriente, sobre todo gracias a la oportunidad de realizar reclamaciones y consultas on-line a través de la página web de la OMIC, www.omicsantapola.com. El proceso “es fácil: al usuario se le da un número de identificador y la OMIC responde. Además, con ese identificador, el ciudadano puede acceder a la consulta de su expediente”, explica Montiel.

            Encarnación Mendiola advirtió a los consumidores sobre el incremento de casos de estafa mediante la venta a puerta fría, cuyas víctimas son, sobre todo, mayores y discapacitados. De la misma manera, animó a los consumidores a continuar haciendo uso de este servicio municipal de cuyo balance se muestra satisfecha.