El alcalde alaba la valiente actuación de los policías locales que salvaron la vida a un vecino de Gran Alacant

lunes, 29 de marzo de 2010

El alcalde de Santa Pola ha recibido esta mañana en su despacho a los dos agentes de la Policía Local que el pasado sábado salvaron la vida a un vecino de Gran Alacant al rescatarle del fuego en su vivienda que se vio afectada por la explosión de una bombona de gas.

Miguel Zaragoza, acompañado del Intendente-Jefe de la Policía Local, transmitió a los agentes Pascual Linares y Jesús Lahoz “el orgullo que sentimos todos los santapoleros por la actuación valiente y arriesgada que protagonizaron los dos agentes jugándose su propia vida, demostrando que son verdaderos profesionales de vocación” y les anunció que la Jefatura de Policía está redactando un expediente “para solicitar a la Generalitat Valenciana que reconozca su valor distinguiéndoles con una mención especial por su acto heroico”, que además será especialmente reconocido por el Ayuntamiento en el próximo acto oficial del patrón del Cuerpo.
El alcalde comunicó que “el mismo sábado hablé por teléfono con el presidente Francisco Camps, quien me pidió que les trasladase su más sincera enhorabuena”, detalle que los agentes agradecieron emocionados por la trascendencia que ha tenido una actuación en la que, sin dudarlo ni un segundo, arriesgaron su propia vida para salvar la de un vecino de 65 años de Gran Alacant, de nacionalidad sueca, y que continúa ingresado en estado grave en el Hospital de Alicante.
Los hechos sucedieron el pasado sábado 27 de marzo alrededor de las 6:05 horas, cuando la policía recibió un aviso de incendio en un bungalow de la calle Canarias. En apenas cinco minutos llegó la patrulla al lugar del siniestro: “a nuestra llegada,  numerosos  vecinos nos alertaron de la existencia de una persona en su interior, que habían escuchado gritar pidiendo auxilio y ya no se le oía”, relataban los agentes que decidieron entrar rápidamente a la vivienda: “llegados al salón,  a través de la gran cantidad de humo existente vimos una botella de butano tumbada sobre el suelo, de cuya goma salía una gran llama”. En ese momento, el oficial Linares accedió hasta la bombona cerrando el paso de gas y desanclando la válvula, lo que evitó que la llama siguiera ardiendo.
Una vez sacada a la calle esta bombona y una segunda que también se encontraba en la casa, los agentes volvieron al interior para buscar al afectado entre el intenso humo, “y al acceder al aseo encontramos a un hombre tumbado boca arriba  en estado de semi-inconsciencia, y que presentaba quemaduras importantes en la cara y cabeza, sangrando abundantemente por la nariz”. Los agentes contaron que “el señor reaccionó cuando lo agarramos para sacarlo a la calle a pesar de su gravedad, y sólo podía articular la palabra “hospital”, por lo que no nos pudo aclarar si había más personas en el interior de la vivienda”.
De esta manera, volvieron a acceder en busca de más posibles víctimas: “nos preocupamos mucho cuando vimos en la planta superior una habitación infantil, pero después de recorrer toda la casa comprobamos que no había nadie más en ella”.  A consecuencia del riesgo del rescate sin ningún tipo de protección específica, los agentes sufrieron una leve intoxicación por inhalación de humo, que por fortuna no les supuso contratiempo alguno.
Cabe destacar que hasta el lugar del siniestro acudió otra patrulla de la Policía Local que ayudó en la atención al accidentado y en las tareas de extinción del incendio. Incluso se personaron varios agentes de paisano que habían acabado recientemente su turno y que, alertados por el suceso, se presentaron rápidamente para apoyar a sus compañeros y al resto de servicios sanitarios y policiales que actuaron.
Pascual Linares y Jesús Lahoz quisieron restar importancia a su heroico acto: “no tuvimos dudas y entramos inmediatamente a pesar del humo, el fuego y la escasa visibilidad, porque lo más importante en ese momento era intentar salvar la vida de una persona aún a riesgo de la nuestra, pero es algo que en ese momento no piensas”.